En la actualidad, el mercado peruano es dependiente de casi un 100% de la importación de fertilizantes provenientes de diversos países.
Debido a la alza de precios de los fertilizantes inorgánicos a nivel mundial, en el mercado existe una práctica creciente de alteración y falsificación de marcas de fertilizantes. Los fertilizantes tales como la urea, fosfato diamónico y cloruro de potasio, están siendo adulterados combinando sus componentes con sal, ladrillo molido, arena blanca, roca fosfórica granulada, etc.
Hoy en día muchos de nuestros agricultores, de todas las regiones del Perú vienen siendo estafados, con productos que no presentan las propiedades físico-químicos que presenta como el grado o riqueza, solubilidad, reacción del fertilizante, índice salino, granulometría, etc.
El comprador local cuenta con un certificado de análisis del fertilizante adquirido, el cual ha sido realizado por un laboratorio internacional, e incluye la concentración de los nutrientes que posee el fertilizante. Por lo tanto, todo aquel que importa un fertilizante cuenta con un certificado de origen del proveedor o productor de dicho producto.
Existen empresas que suelen confundir al agricultor con nombres similares a marcas registradas.
En el mercado de fertilizantes compuestos a base de mezclas físicas, también se da el caso de la adulteración a través de insumos de mala calidad, la cual incluye en las mezclas elementos tales como sal, ladrillo molido, arena, etc. De esta manera, un fertilizante compuesto 15-15-15, al ser adulterado puede resultar en valores de 5-0-0.
Por eso amigo productor, de parte de todo el equipo de redactores del el agronómico, le recomendamos comprar sus productos en una tienda de confianza que cumpla todo los requisitos legales.
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